Un hombre de
su pasado
Creo
que Madre coquetea con un hombre de su pasado que no es Padre. Me digo: ¡Madre
no debería tener relaciones impropias con este hombre Franz! “Franz” es
europeo. ¡Digo que ella no debería ver a este hombre impropiamente mientras
Padre está lejos! Pero confundo una antigua realidad con una nueva: Padre no
regresará a casa. Él se quedará en Vernon Hall. En cuanto a Madre, tiene
noventa y cuatro años. ¿Cómo pueden existir relaciones impropias con una mujer
de noventa y cuatro? Sin embargo, mi confusión es la siguiente: aunque su
cuerpo es viejo, su capacidad para la traición aun se mantiene joven y
saludable.
De Varieties of Disturbance (2007).
El perro y
yo
Una
hormiga también puede mirarte desde abajo, incluso amenazarte con sus patas. Por
supuesto mi perro no sabe que soy un humano, él me ve como un perro, aunque yo
no salte la cerca. Soy un perro fuerte. Pero yo no camino con el hocico abierto
de par en par cuando salgo a dar un paseo. Ni siquiera en un día caluroso dejo
que me cuelgue la lengua. Pero si le ladro ¡No! ¡No!
De Varieties of Disturbance (2007).
Culta
No sé
si puedo seguir siendo su amiga. Lo he pensado una y otra vez, ella nunca sabrá
cuanto. Le di una última oportunidad. Después de un año, la llamé. Pero no me
gustó el rumbo que tomó la conversación. El problema es que ella no es muy
culta. Quizás debería decir que no lo suficiente como para mí. Tiene casi
cincuenta años y, hasta donde veo, no es más culta de lo que era hace veinte
años cuando la conocí y hablamos sobre todo de hombres. En ese entonces no me
importó lo poco culta que fuera, quizás porque yo tampoco lo era tanto. Creo
que ahora yo soy más culta, y ciertamente más que ella, aunque reconozco que no
es muy culto decir eso. Pero deseo decirlo, así que estoy dispuesta a aplazar
seguir cultivándome, de manera que aun pueda decir un par de cosas acerca de mi
amiga.
De Varieties of Disturbance (2007).
El concurso
del buen gusto
Un
marido y su mujer competían en un Concurso de Buen Gusto cuyo jurado presidían
algunos de sus colegas, hombres y mujeres de buen gusto entre los que se
encontraban un diseñador industrial, un distribuidor de libros raros, un
pastelero y un bibliotecario. Juzgaron que la mujer tenía mejor gusto en
muebles, especialmente en muebles antiguos. El esposo por lo general tenía mal
gusto en accesorios de iluminación, vajilla y cristalería. El gusto de la mujer
era indiferente en cuanto a cortinas, pero tanto el marido como la mujer tenían
buen gusto en protectores de piso, ropa de cama, toallas y electrodomésticos.
Consideraron que el marido poseía buen gusto tanto en comida como en bebidas
alcohólicas, mientras que la esposa, inconsistentemente, pasaba del mal al buen
gusto en comida. En ropa, el marido tenía mejor gusto que la mujer, aunque un
gusto inconsistente en perfumes y colonias. Juzgaron que, mientras que tanto el
marido como la mujer tenían un gusto no más que aceptable en diseño de
jardines, tenían buen gusto en una buena cantidad y variedad de encinas.
Consideraron que el marido tenía buen gusto en rosas pero mal gusto en
bulbos. Consideraron que la mujer tenía
mejor gusto en bulbos y por lo general buen gusto en plantas de interior con
excepción de las hostas. Consideraron que el gusto del marido era bueno en
muebles de jardín pero solo aceptable en plantas ornamentales. Juzgaron que el
gusto de la mujer era consistentemente pobre en estatuas de jardín. Tras una
breve discusión, el jurado dio como ganador al marido por su puntuación general
más alta.
De Varieties of Disturbance (2007).
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